PREHISTORIA

La prehistoria es el período que comprende entre la aparición de los primeros homínidos hace entorno a 2,5 millones de años hasta alrededor del año 3000 antes de la era común, con la invención de la escritura en Mesopotamia. En el caso de Armallones, este período se extenderás hasta la celtización de los pueblo aborígenes del centro peninsular dando origen a la cultura celtíbera, la cual utilizó el alfabeto íbero para escribir.

PRIMEROS POBLADORES

Aún hoy se debate sobre la datación de los restos más antiguos de homínidos que se encuentran en la península Ibérica entorno 1,5 a 1,2 millones de años en la Sima del Elefante, en la sierra de Atapuerca, pudiendo tratarse de un Homo erectus, consistiendo su estilo de vida en la recolección y la caza. También destacan por su antigüedad los yacimientos de Fuente Nueva 3 y Barranco León 5 en la provincia de Granada.

Además, se han encontrado restos del Homo antecessor, con los mismos hábitos, aunque con el matiz de indicios de que practicase el canibalismo. Se especula que éstos llegaron a nuestra Península por la vía oriental atravesando los Pirineos, o por la vía meridional, atravesando el estrecho de Gibraltar.

Hace 150.000 años en Iberia comenzó a habitar la especie del Homo neanderthalensis viviendo hasta hace 35.000 años, también con hábitos de caza y recolección además del inicio de la práctica de las ilustraciones prehistóricas en los techos de las cuevas, la pintura rupestre, como la que podemos encontrar hoy en día en la Cueva de los Casares en el municipio de Riba de Saelices o en la Cueva de la Hoz en Santa María del Espino, relativamente cercanas a Armallones.

Ritual chamánico o rito de iniciación de inmersión acuática en la

Cueva de los Casares

(Imagen de Wikipedia.org)

Retrato del homo sapiens

(Imagen de archeotravelers.com)

EL HOMO SAPIENS

Finalmente tuvimos constancia de que, hace alrededor de 35.000 años, el Homo sapiens, nuestra actual especie, estuvo habitando nuestro territorio y cambió su estilo de vida convirtiéndose en nómada e iniciando una industria lítica basada en la creación de herramientas de piedra, hueso o marfil.

Hacia el año 6.000 a.C. comenzó el período Neolítico en la península Ibérica, caracterizado por la creación de la cerámica y la sedentarización de la población, dejando de lado el nomadismo al comenzar la práctica de la agricultura y la ganadería. También se inició la cultura de los monumentos megalíticos, grandes estructuras de piedra que indicaban un sepulcro comunitario para una tribu.

UN ENTORNO PROPICIO

Armallones se encuentra próximo a paredes de piedra que forman cuevas y abrigos rocosos, lo que podría haber dado lugar a antiguos poblamientos prehistóricos, además de que en el trazado de las vías de comunicación de tierra han dejado aflorar algunos minerales como el sílex, imprescindible durante este periodo para la fabricación de herramientas y que hubiese ayudado a una posible población a prosperar.

Un ejemplo es la Covacha de las Grajas, una oquedad rocosa de gran tamaño que pudo servir de cobijo para un grupo de personas durante tiempos remotos, y que recientemente se continuó utilizando como refugio para pastores.

Este tipo de formaciones son características de todo el Alto Tajo.

Interior de la Covacha de las Grajas

(Fotografía de Alfredo de la Llana Molina)